7 Feb 2014

Qué harás, pequeño soldado,
cuando ya no puedas caminar,
cuando tus botas ya no se impregnen
ni de arena ni bondad.
Me pregunto qué harás pues,
si tus pies pararán o si por el contrario,
testarudos y degenerados, comienzan en ti a trazar.
Una carretera, soldadito, donde ya no existirá ninguna paz.
Así que dime, hombrecillo,
qué es que harás cuando ya no puedas caminar.
A caso, dime, te resignarás a olvidar?
No lo hagas, corazón mío, no dejes a tu cabeza reinar,
si eso sucede probablemente no importe más la humanidad.
Así que descansa, soldado, deja los dedos respirar,
póstrate sobre la arena y olvídate a la mar.


Leave a Reply

Subscribe to Posts | Subscribe to Comments